Conoce a la gata viajera
La gatita, llamada Holly, se había extraviado y se las rebuscó para volver a su casa. Sus patas quedaron lastimadas, pero llegó con vida. Enterate cómo hizo en esta nota.
Increíble, pero cierto. Ocurrió en Daytona Beach, Florida, Estados Unidos: una gata tricolor se había perdido en un viaje familiar y pudo regresar a su casa tras viajar 320 kilómetros en dos meses.
Su nombre es Holly y tiene cuatro años. Sus dueño Jacob y Bonnie Richter se dieron cuenta al regresar de un viaje que ella faltaba. Dos meses después la gata fue encontrada en el patio trasero de familiares. Luego del viaje sus dueños señalaron que se encontraba débil y desnutrida, aunque estaban felices de su regreso.
«Las almohadillas de sus patas estaban sangrando» señaló Jacob. Y agregó que «sus garras estaban muy desgastadas. Las frontales muy afiladas, mientras que las de atrás son casi inexistentes».
Científicos que supieron del caso se encuentran escépticos de que un gato haya logrado recorrer una distancia tan grande y llegar exitosamente a la casa de sus dueños.
Incrédulos ante la situación John Badshaw, director del Instituto de Antrozoología de Bristol se preguntó: «¿Están seguros de que es el mismo gato? Los gatos son vagabundos, y las personas lo pueden justificar mentalmente y esperar que sea el mismo gato».
Pero los Richter le habían implantado un microchip a la gatita y de esta forma pudieron comprobar que se trataba, efectivamente, de Holly.
«Creo de verdad en estas historias, pero son difíciles de explicar», expresó Marc Bekoff, ecologista experto en comportamiento de la Universidad de Colorado. Y agregó: «Quizás es inteligencia callejera, quizás puede leer autos, quizás es una buena cazadora. No tengo datos al respecto».
Bradshaw justificó lo ocurrido diciendo que quizás Holly logró viajar escondiéndose bajo el maletero de un auto. Pero quedó descartado porque las condiciones de sus patas demostraron lo contrario.
Además, el experto señaló que es más común escuchar casos de perros que recorren largas distancias para volver donde sus dueños, pero hay muy pocos casos conocidos de gatos.